Con un título como este, no me extraña que la gente se mantenga lejos de los cines. Antes de comenzar me gustaría felicitar al sobradamente gilipollas que tradujo el título al español, pero que lo tradujo a medias. Donde este capullo puso Sky Captain y el Mundo del Mañana debería haber puesto ?El capitán Sky y el mundo del mañana?? y aún con esta traducción nos estamos tomando la licencia de dejar su nombre en inglés. Otra soberana cagada de la traducción es el uso indebido de mayúsculas. Al contrario del inglés, en el que se ponen a diestro y siniestro, el español es un poco más restrictivo y en este caso sobran.
Y ahora que me he quedado tan a gustito vamos con la película. Sky Captain and the World of Tomorrow es una película de ciencia-ficción y aventura ambientada en Nueva York en los años treinta. Toda la ambientación está hecha con imágenes generadas por ordenador y eso le otorga un aspecto de comic que para mí es genial. Hay que destacar también la fotografía de la película, llena de sombras, sobre todo en las caras de los personajes, que le da un aspecto visual fantástico.
La trama es también una trama de comic. Unos robots enormes atacan varias ciudades de la tierra para robar recursos específicos. Un hombre, el capitán Sky tendrá que luchar contra los elementos para conseguir salvar la tierra en un corto espacio de tiempo. La película está protagonizada por
Jude Law y Gwyneth Paltrow. Ambos están muy convincentes. Según una amiga, Jude Law tiene muchos ?poros negros??. Hay que ver el nivelazo de las mujeres españolas con el metrosexualismo ese de mierda. Yo soy un pobre desgraciado, porque honestamente, Jude Law es jodidamente guapo y eso es una verdad innegable. Cambiaría mi careto por el suyo con todos esos poros sucios en la cara sin pensármelo ni un segundo. Gwyneth Paltrow hace de rubia cabroncilla que le toca un poco los huevos al capitán, aunque desgraciadamente no enseña chicha.
En papeles secundarios tenemos a Angelina Joile, que está más buena que el pan con nocilla y Giovanni Ribisi. Mención aparte merece Laurence Olivier, que aunque lleva un ratillo muerto, lo incrustaron en la peli y seguro que sus herederos han recibido el cheque super contentos.
Todo esto fue espléndidamente dirigido por Kerry Conran, un director novel al que seguiremos atentamente en el futuro.
Así que si os habéis pasado la vida leyendo libros de ciencia-ficción, tenéis un toque friki, os gustan las pelis de aventura y sois capaces de creeros una historia de ciencia-ficción ambientada hace más de setenta años, esta es una película que definitivamente hay que ver.