
El preestreno sorpresa de esta semana consiguió sorprender a todo el mundo, que en el foro en el que la gente habla de estas pelis, ésta no aparecía ni de coña, pero ya había visto el tráiler y estaba en mi lista de cosas que quiero ver, así que en mi caso estuve muy contento de verla y visto que no se marchó nadie del cine, parece que también complació al resto de los espectadores. La película se titula September 5 y en España se estrenó al final de enero con el título de Septiembre 5, fecha en la que como todos los demas días, recordamos que truscoluña no es nación.
Unos julays son asesinados por JOSDEPUTA-terroristas-islámicos.
Ya en 1972, la gentuza, la miasma y la ralea que atentaba en Europa y mataba gente eran todos y cada uno de ellos, musulmanes, exactamente como sucede hoy en día e igual que hoy, la izquierda de puteros, putas y ladrones los defendía y trataba de culpar a las víctimas. Un grupo de atletas israelíes fueron raptados por un puñado de hijosdeputa-terroristas-islámicos-de-mielda y fueron asesinados por ese grupo de ratas asquerosas y zarrapastrosas, mientras un equipo de telelevisión gringo lo retransmitió todo porque su estudio olímpico estaba al lado del lugar en el que ocurrió todo.
Esta película nos recuerda que la historia se sigue repitiendo y no aprendemos de ella absolutamente nada. Sirve también para recordarnos que, como dice el refranero, moro bueno es moro muerto. Aquí vemos como un puñado de moros secuestra a un grupo de atletas judíos y los mataron. Vivimos la secuencia completa, desde el secuestro hasta la muerta y somos testigos de como falló la policía, por culpa de leyes blandengues, de como falló el ejército alemán y de como fallaron todos los demás. La película ciertamente disgustará a la izquierda porque hay una cosa que nos deja bien claro, no están aquí para integrarse, están aquí para matar e imponer su mierda de cultura pleistocénica. El director consigue crear un thriller sólido y en el que la tensión va en aumento según avanza la historia. Está fabulosamente interpretada y consiguen contar la historia, sin darnos un instante de pausa, en algo más de hora y media.
Por razones obvias la detestarán los miembros del Clan de los Orcos y todos los rojos y escoria suciolista, podemita y truscolana que hay entre los sub-intelectuales con GafaPasta.
